Inestabilidad en la Policía Municipal de Rioverde

En menos de dos meses el Gobierno de Rioverde ha realizado tres veces cambio de jefe de la policía municipal, lo que denota un problema serio de desorganización interna, donde se han propiciado irregularidades en el desempeño, y el alcalde Ramón Torres y su equipo no han encontrado la estrategia mas eficaz para prevenir el delito, debido a que los robos siguen a la orden del día.

El primer relevo se dio el pasado 10 de marzo del presente año donde Roberto Carlos Hernández Domínguez fue quitado de la jefatura, y confinado al área de reclutamiento municipal, debido a inconsistencias en su desempeño, que ellos –alcalde y súbditos-señalaron que era para mejorar, pero además se dió apenas a días de que se reventó la casa en el bulevar Ferrocarrilero casi esquina con el Jonguitud Barrios, donde encontraron armas y drogas, así como muchas otras evidencias que son del dominio público.

Fue suplido por el subdirector Jesús Rendón Sánchez, pero solo fue interinato, cuando posiblemente este elemento es quien mas merece quedarse al frente de la corporación, que la conoce al revés y al derecho, además de convivir diariamente por muchos años con todos los elementos.

Apenas duró cuatro días en el cargo, cuando llegó recién desempacado del gobierno gallardista de Soledad de Graciano Sánchez, el teniente coronel Arturo Salazar Adams, a quien presentaron con bombo y platillo en el salón de cabildo municipal, y le daban otra vez las gracias a Jesús Rendón, que solo sirvió momentáneamente para apagar el fuego.

Sin embargo Salazar Adams pudo hacer cometido un error garrafal, cuando ante comerciantes expuso la colusión del grupo Búhos de vigilancia privada en Rioverde, con los robos registrados por esas fechas, y eso no les gusto a los comerciantes que reciben sus servicios, mucho menos al alcalde, que le dio la espalda, y en lugar de ofrecer una investigación y apoyarlo, le dijo “que se defendiera con sus uñas”.

Acto seguido se da esta renuncia, porque supuestamente Salazar Adams fue requerido por la Guardia Nacional, sin embargo una cosa es lo que se dice, y otro lo que se fragua entretelones.