Desde la Iglesia Católica se aporta al Comité Estatal para la Seguridad en Salud para evitar mayores contagios de coronavirus con la presentación de protocolos y programas, pero además se ha visto una mayor participación de los sacerdotes al visitar a los enfermos de Covid, quienes piden los santos óleos, indicó Gilberto Amaya Martínez, vicario general de la Arquidiócesis de San Luis Potosí.

Señaló que en algunas áreas de hospital las personas han pedido a los sacerdotes que den este servicio a quienes están entubados, sin embargo las áreas Covid son de alta restricción por lo que se echa mano de la indulgencia plenaria mundial y de bendición mundial que aplican para este tipo de circunstancias extraordinarias como en tiempo de guerra o catástrofe.

"En la medida que hay posibilidades lo hacemos, el sacramento de la unción ensun sacramento de vida, pero en este momento por una urgencia o enfermedad implica situaciones especiales, incluso en las celebraciones eucarísticas", agregó.

Señaló que en la parroquia de Tlaxcala se da la unción para los enfermos y adultos mayores con la sana distancia de 3 metros, mientras que también acuden a clínicas privadas para la eucaristía, para confesar, o aplicar la unción de enfermos, caso contrario al Hospital Central o a la Clínica 50 del IMSS donde la restricción es estricta.

Dijo que los sacerdotes tienen una restricción conforme a los lineamientos para los enfermos Covid por lo que en caso de otorgar un sacramento lo hacen con el equipo recomendado. “Se valora la dimensión propia y no se infringe la restricción que se tiene en estas áreas”.

Sobre el trato que se les da a los enfermos de Covid y si pudieran considerarse como inhumanos, dijo que esta enfermedad es muy acelerada y cuando se requiere un proceso de entubación veces el desenlace se da en ocho días, lo que implica que se aísle la familia y evitar que quien muere sea un foco de infección, “no son elementos inhumanos son necesarios para que las familias afectadas no estén también en riesgo”.

Sobre la necesidad de reducir de nueva cuenta la presencia de feligreses en las Iglesias, dijo que oficialmente deben estar 30 personas como máximo en los templos sin embargo hay iglesias muy grandes por lo que se puede tener un mayor cupo de fieles, sin embargo explicó que la disminución dependerá de las medidas que se tomen de acuerdo a la semaforización

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