Ha comenzado un nuevo ciclo escolar 2020-2021 y debido a la situación epidemiológica por la enfermedad COVID-19 las clases presenciales han sido suspendidas, no obstante con la finalidad evitar rezagos en el bienestar y el aprendizaje de las niñas, niños y adolescentes la Secretaría de Educación Pública (SEP) puso en operación el programa “Aprende en Casa II” para llevar a cabo las actividades académicas a distancia.

Y en este contexto, queremos informar a la población, a niñas, niños y adolescentes, a madres, padres, tutores o personal educativo sobre la importancia y el impacto de la nutrición para lograr un buen rendimiento escolar. “Sabemos que los primeros años de vida en las personas menores de 18 años son relevantes por los procesos de crecimiento y desarrollo, para los cuales la alimentación juega un papel primordial”, señaló la doctora María Jocelyn Bravo Ruvalcaba, Jefa del Depto. de Atención a la Salud de la Infancia y la Adolescencia de los Servicios de Salud en el Estado.

“Existe evidencia de que hay una relación directa entre la nutrición y el rendimiento escolar, ya que, si una niña, niño o adolescente tiene una alimentación inadecuada, puede llegar a presentar dificultades en su aprendizaje, falta de concentración a la hora de realizar tareas, tener menor motivación y curiosidad, disminución en su atención y actividad física”.

“De ahí que queremos que toda la población conozcan los beneficios de una dieta suficiente, completa, equilibrada, adecuada, variada e higiénica; sobre todo que sepan cómo combinar los alimentos para que las y los escolares puedan mantenerse atentos, activos y desarrollarse de mejor manera durante su jornada educativa”, puntualizó señalando la funcionaria pública.

De tal forma que compartió algunas recomendaciones para tener una mejor nutrición de manera disciplinada: por lo que es importante establecer un horario de comidas y lugar sin distractores:

“Durante el tiempo en casa procure que niñas, niños y adolescentes tengan establecidos horarios de comida y actividades, esto contribuirá a que no consuma alimentos de más y contribuyan a un aumento de peso. El desayuno es esencial previo a las actividades escolares. Un lugar sin distractores ayudará a que los niños y niñas satisfagan sus necesidades y no consuman de más, debido a que su atención está inmersa en los alimentos y no en distractores”.

“El mantenerlos hidratados es clave, procura no ofrecer ni tener en tu casa bebidas azucaradas como jugos, refrescos o leches saborizadas. Prefiere siempre el consumo de agua natural o en caso de que no sea del agrado de los menores ofrecer aguas de frutas frescas sin azúcar añadida, utiliza de preferencia las frutas de temporada”, sugirió la Jefa del Depto. de Atención a la Salud de la Infancia y la Adolescencia de los Servicios de Salud en el Estado.

Agregó que la hidratación adecuada es medible por lo que la cantidad de vasos recomendada por edad es la siguiente: si el menor tiene 2 años de edad se aconseja que beba 2.5 vasos de 240 ml; de 3-5 años debe consumir de 3- 4 vasos de 240 ml; De 6 a 9 años beber de 4.5 a 5 vasos de agua y de los 10 a los 12 años de edad deben tomar de 5 a 6 vasos y medio de agua.

En lo que respecta al consumo de frutas y verduras en las niñas y niños deben consumir de 1-2 porciones de frutas y 2-3 de verduras al día. “Es importante continuar con el consumo de este grupo de alimentos debido a que su rico contenido de vitaminas ayuda a mantener fuerte el sistema de las defensas. Ofrezca frutas y verduras de temporada, permita que los niños y niñas apoyen en el montaje del platillo, déjelos que usen su imaginación para que desarrollen un platillo divertido y colorido.

Otros productos alimentarios que generan buen aporte nutricional son: los cereales integrales y leguminosas. Ofrezca de preferencia cereales que provengan de granos enteros (pan integral, pasta integral, arroz integral) y leguminosas; entre comidas la colación saludable es la opción, es común que los niños y niñas al estar en casa se aburran y tiendan a comer más, si esto ocurre procura tener a la mano colaciones que ellos pudieran consumir como: jícama, pepino y zanahorias picadas.

La Dra. María Jocelyn Bravo Ruvalcaba fue muy clara al afirmar que se debe evitar comprar y tener en casa “comida rápida”, es decir, productos industrializados como: papas fritas, dulces, pizza congelada, etc. Debido a que su elevado consumo contribuye al aumento de peso, y que a su vez favorece al desarrollo de enfermedades crónicas.

Optar por los lácteos es otra opción para fortalecer el bienestar familiar, por lo que el ofrecer yogurt o leche baja en grasa, dará el aporte de calcio que es importante en esta etapa para el desarrollo de huesos sanos y fuertes; en lo que respecta a los productos de origen animal pidió a la ciudadanía que prefiera pollo y pescado sobre cerdo y res, además procuren cocinar con muy poca mantequilla, grasa o aceite, o mejor opten por brindar platillos asados, hervidos o a la plancha, por ejemplo: el filete de pollo a la plancha y evita el uso de empanizados.

Finalmente la doctora María Jocelyn Bravo Ruvalcaba, Jefa del Depto. de Atención a la Salud de la Infancia y la Adolescencia de los Servicios de Salud en el Estado informó que los Servicios de Salud cuentan con unidades de atención médica continua para seguir brindando atención a la población, en especial para dar seguimiento a niñas y niños con problemas de malnutrición, como: desnutrición, sobrepeso y obesidad, siempre recordando las medidas de prevención: sana distancia, uso de cubrebocas e higiene frecuente de manos.

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